De aburrido a chispeante
Ayer, sábado tarde. Recibí un aviso de mi jefa. Tiene la mala costumbre de saltarse cualquier pacto horario acordado. Y yo la de permitírselo con una sonrisa.—Reunión de trabajo —me dijo—. Tengo una idea y quiero empezar ya. Ja. Así, sin más....